El prisionero bahreiní, quien además condenado a muerte, Maher Al-Jabaz, sufrió recientemente graves lesiones y heridas tras ser golpeado por un grupo de guardias de la cárcel en donde se encuentraba antes de ser trasladado a un lugar desconocido [para su inminente ejecución], según lo transmitido por otros reclusos de la prisión de Yaw
La información reveló que Al-Jabaz fue golpeado por pasar un supuesto tiempo prolongado en el baño del recinto penitenciario.
El policía Walid Ar-Rifai atacó a Al-Jabaz en su habitación, rompió el Corán que se encontraba en las manos de la víctima y aplastó sus tubas [bloques de arcilla] que se usan para la postración durante las oraciones de los shiítas; la situación además produjo que Al-Khabaz fuera sacado de su celda.
La información agregó que Ar-Rifai indujo a un grupo de guardias de la prisión que comenzaran a golpear a Al-Jabaz y luego fue llevado a un lugar desconocido por sus compañeros de prisión.
La familia de Al-Jabaz responsabilizó al ministro del Interior y al jefe de la prisión de Yaw por la seguridad de su hijo y exigió que se revelara su paradero.
Traducido por ABNA24 redacción española
